La prueba que Dios nos ama está en que Cristo murió por nosotros, cuando aún éramos pecadores. Esta proclamación poderosa de San Pablo debe ser una fuente rica de reflexión como continuamos nuestra peregrinación cuaresmal.
La prueba que Dios nos ama… ¡Dios no tiene que demostrar su amor por nosotros! Somos criaturas y no tenemos derecho de esperar que nuestro Creador nos ame. Un Creador puede crear una criatura que el Creador no ama. Por lo tanto, es increíble, que creemos en un Dios que no sólo nos ama, aunque somos sus criaturas, pero también quiere disipar cualquier duda en nuestra mente de su amor por nosotros. Es una bendición para nosotros que tenemos un Dios que no sólo nos ama como Dios hace, pero también tiene el deseo fuerte de demostrar la profundidad del amor tiene por nosotros para que siempre tengamos la confianza completa en el amor firme y fiel de Dios por nosotros.
¿Cómo prueba Dios su amor por nosotros? Cristo murió por nosotros, cuando aún éramos pecadores. Jesús era completamente humano y completamente divino. Jesús era y es Dios. En su humanidad, Jesús aceptó su propio sufrimiento y muerte para liberarnos del poder de pecado y muerte. Por su cruz y resurrección, Jesús nos ha liberado del poder de pecado, sufrimiento, mal y muerte. ¿Merecimos un don tan increíble? ¡Si usted dijera “Sí”, entonces es un santo o terriblemente arrogante! Si tuviéramos una vida sin fin, no podríamos merecer o ganar el don especial de nuestra salvación que fue ganó por nosotros por el sufrimiento, muerte y resurrección de Jesucristo. Somos pecadores. No vivimos en fidelidad completa a lo que Dios espera de nosotros como sus hijos e hijas. Pero Dios, en la personas de Jesús, abrazó su sufrimiento y muerte para darnos la esperanza de una vida eterna. ¿Cuánto más puede hacer Dios para demostrar su amor por nosotros que el hombre inocente, Jesús, murió por nosotros que somos culpables de pecado?