December 20, 2016
Hay Tiempo para Preparar Su Corazón para la Fiesta de Navidad
En esta última semana de Adviento, ¿Parece que la Navidad ya ha llegado y ha pasado? Esta semana nos ofrece la oportunidad de entrar en la celebración de Navidad con corazones y mentes renovados.
Como nuestra iglesia católica nos invita a entrar en un tiempo de oración y reflexión en anticipación de la Fiesta de Navidad (la temporada de Adviento), nuestro mundo está ya inmerso en la Navidad. ¿Ha asistido a una fiesta de Navidad? ¿Ha intercambiado regalos ya? ¿Ha perdido su interés en al árbol de Navidad que decoró el Día de Acción de Gracias o el día después? Esta semana nos da la oportunidad de hacer una pausa y recordar el significado de la fiesta que vamos a celebrar muy pronto. Tenemos que decidir si aprovecharemos esta oportunidad o no. No es difícil. No requiere mucho tiempo. Simplemente requiere el deseo de entrar esta última semana de Adviento con la intención de experimentar en nuestros corazones lo que esta fiesta celebra.
Cada día de esta semana, encuentra cinco o diez minutos de tiempo tranquilo para leer este pasaje del evangelio de San Juan: “Porque de tal manera amó Dios al mundo, que dio a Su Hijo unigénito, para que todo aquél que cree en El, no se pierda, sino que tenga vida eterna.” Dios ama este mundo. Dios te ama personalmente. Tal vez en este momento su vida está llena con dificultades, pero puede encontrar la paz, la fuerza y la alegría en el reconocimiento que Dios le ama y Dios le ama como es. Para compartir ese amor, haga algo amable para alguien esta semana, especialmente a alguien que no le gusta. Compre un café para un compañero de trabajo. Visite una persona que no puede salir su casa y tráigale un regalo pequeño de galletas o dulces. Le dé guantas a una persona sin casa. Esta oración diaria y sus pequeños actos de bondad, le recuerdan que la esencia de la Fiesta de Navidad es amor. El significado de esta fiesta es el amor de Dios para nosotros y cómo podemos encarnar el amor divino en nuestras vidas por la manera de nuestras vidas.
¡Use esta última semana de Adviento para preparar sus corazones para la fiesta de Navidad!
Padre Marcos Hallinan, S.J.