April 23, 2017
La Alegría de Nuestra Salvación
A Cristo Jesús ustedes no lo han visto y, sin embargo, lo aman; al creer en él ahora, sin verlo, se llenan de una alegría radiante e indescriptible, seguros de alcanzar la salvación de sus almas, que es la meta de la fe. ¿Reflejamos nuestras vidas la alegría de esta proclamación?
¿Amamos a Cristo? Amar Cristo significa que deseamos una relación viva con él a través de oración, a través de nuestra reflexión sobre las escrituras y a través de nuestra confianza en él en las alegrías y las penas de nuestras vidas. ¿Ama a Cristo? ¿Cultiva una relación viva con él? ¿Ora regularmente? ¿Le ayuda su oración a creer en Cristo incluso en los tiempos más difíciles en su vida? ¿Si dice que ama al Cristo que no ve, es esto evidente en su amor del Cristo que puede ver? Cristo dijo:
‘En verdad les digo que en cuanto lo hicieron a uno de estos hermanos Míos, aun a los más pequeños, a Mí lo hicieron.’ Por lo tanto, si viola la dignidad de otra persona por su acciones o palabras, si no tiene compasión para otras personas, o si no tiene una preocupación para las personas en necesidad, entonces no ama a Cristo que puede ver. ¿Y si no ama al Cristo que puede ver, como puede decir que ama al Cristo no puede ver?
La temporada de Pascua nos ofrece la oportunidad de renovar nuestra relación con el Cristo Resucitado y fortalecer nuestra fe en él. ¿Si fuera fiel a algunas disciplinas cuaresmales como oraciones adicionales, ayuno o renunciar a algo, que hará durante esta temporada de Pascua para profundizar su amor para Jesús y fortalecer su fe en él? ¿Orará regularmente? ¿Seguirá controlando sus pensamientos y sus acciones para que son en conformidad al ejemplo y la enseñanza de Cristo? ¿Buscará las oportunidades de ver Cristo en otras personas y responder a ellos como querría responder a Cristo – los enfermos, las personas que no pueden salir sus casas, los hambrientos, los inmigrantes? ¿Hará esto en la alegría que a través de estos esfuerzos de ser fiel a Jesucristo y su evangelio experimentará su salvación en Jesucristo – la vida eterna con él?
¡Qué esta temporada de Pascua sea rica en las bendiciones de Dios para usted!
Padre Marcos Hallinan, S.J