October 29, 2017
El Mandamiento Principal es la Ley del Amor
Mateo 22:34-40
Una vez más la primera lectura y el Evangelio van de la mano. En efecto, la lectura del Libro del Éxodo nos prepara para la respuesta que da Jesús en el Evangelio del día de hoy. Jesús es fiel a la tradición religiosa que nos pide amar a Dios sobre todas las cosas, pero al mismo tiempo desafía al creyente de todos los tiempos a poner ese amor a Dios en el amor concreto hacia los hermanos y hermanas y de esa forma cumplir con toda la ley. En este poco tiempo como párroco he vivenciado de múltiples maneras como muchos de ustedes aman y sirven a nuestros hermanos enfermos, inmigrantes, abandonados y/o madres solteras. Una vez más Jesús nos recuerda que la oración debe ir unida a la acción. No podemos decir que amamos a Dios sino somos solidarios hasta el cansancio con aquellos que padecen hoy en nuestra sociedad. Jesús nos enseña al igual que la semana pasada que todo viene de Dios y que todo lo que somos es de Dios. Así también, no podemos caer en la trampa de separar de la ley divina lo que es esencial de lo aparentemente secundario. Jesús nos pide no descuidarnos del llamamiento bautismal y su implicación de hacernos hermanos con todos los que formamos su Iglesia. Jesús manifiesta que debemos amar a Dios con toda nuestra persona (corazón, alma y ser) y hacerlo visible en el amor al prójimo. Trabajemos pues juntos por recrear esta ley del amor en nuestra parroquia.
«Estas palabras nos recuerdan ante todo que el amor por una persona, y también por el Señor, se demuestra no con las palabras, sino con los hechos; y también “cumplir los mandamientos” se debe entender en sentido existencial, de modo que toda la vida se vea implicada. En efecto, ser cristianos no significa principalmente pertenecer a una cierta cultura o adherir a una cierta doctrina, sino más bien vincular la propia vida, en cada uno de sus aspectos, a la persona de Jesús y, a través de Él, al Padre.» (S.S. Francisco)
Padre Hernán, S.J